Publicado por Sombra

Hace días que ando intentando escribir sobre como me siento tras finalizar un año tan nefasto, al principio todo era desconsuelo, el día 30 estuve llorando mientras comía un rollito del telepizza y veía una película con Maiku, es una tarea difícil consolar a una persona como yo.

A las 4 de la mañana, después de 5 horas durmiendo en el sofá, Maiku me arrastró a la cama, esperó a que me durmiese y se fue. Al día siguiente, volví al sofá, no me pude duchar, me sentía tan mal que no tenía fuerzas para seguir adelante al menos en ese momento.

Cuando llegué a la cena, arropada de mi familia, me sentí mejor, pero bastaba quedarme sola por ejemplo en el baño para ponerme otra vez a llorar. A pesar de todo, me disfracé y puse todo de mi parte por sonreír esas primeras horas del 2007, sin embargo no duró mucho, a penas 5 horas después, una tercera persona me dijo un par de cosas que no debió decir, al menos ese día y en ese momento, tras 4 años de silencio. Parece ser que da igual porque el alcohol habló por él, una pena que yo no fuese así de mal para no recordarlo. Nota mental: emborráchate más Sombra, que así no distinguirás lo real de lo irreal y las gilipolleces de la gente de la verdad

Cuando te rechazan el sentimiento es muy complicado de expresar, el corazón es un músculo flexible que se repara con más facilidad de la que creemos, pero ante esta situación nos volvemos vulnerables durante unos días, semanas o meses.

No llega a ser tan doloroso como una pérdida, ni tan duro como para dejar de seguir adelante, ¿que le vamos a hacer?, pero nos puede inutilizar. Una vez superado, las cosas cambian, afloran sentimientos que antes nunca habíamos tenido,….Ahora todo es muy confuso, tremendamente confuso. ¿Qué puedo hacer?

“Yo no soy tu ángel, yo no soy tu ángel, yo no soy tu ángel.
Esta noche me voy de paseo
con mis zapatitos de tacón
a ver si me busco un buen jaleo
que me desempolve la pasión.
Que nos parta un rayo y que te parta más a ti”